José Miguel Insulza, secretario general de la OEA (ABI) La Paz, 1 jul (ABI).- El presidente boliviano, Evo Morales, propuso el miércoles a la Organización de Estados Americanos (OEA) crear un Tribunal Penal Interamericano para investigar y juzgar a los responsables del golpe militar perpetrado el pasado domingo en contra del presidente constitucional de la República de Honduras, Manuel Zelaya. “El Estado Plurinacional de Bolivia propone que la Asamblea General de la OEA cree un Tribunal Penal Interamericano para la democracia en Honduras ´ad hoc´, que tendrá como finalidad, la recepción de denuncias, investigación, procesamiento y sanción a las personas que hayan cometido delitos y atentado contra la democracia y los derechos humanos en la hermana república de Honduras”, anunció Morales en una conferencia de prensa en el presidencial Palacio Quemado. El Jefe de Estado anunció que enviará la propuesta al secretario general de la OEA, el chileno Miguel Insulza, que incluye también la creación de un tribunal penal permanente tomando en cuenta el artículo de la Carta Democrática Interamericana que señala que “los pueblos de América, tienen derecho a la democracia y sus gobernantes tienen la obligación de promoverla y defenderla”. Con este Tribunal Morales pretende que ningún grupo civil o militar intente en Centroamérica, el Caribe o Sudamérica ser una base militar del imperio, bajo prebendas o condicionamientos económicos. "Es una propuesta que hoy mismo enviaremos al secretario general de la OEA y a la Asamblea, para ver cómo podemos recuperar la democracia en Honduras", explicó El gobernante boliviano lamentó que en Latinoamérica todavía hay grupos de militares “que desprestigian a las fuerzas armadas” como el mejor instrumento de las oligarquías, del neocolonialismo y del neoliberalismo, “por tanto del imperio”. “Lamentablemente, algunos grupos de las Fuerzas Armadas como en Honduras todavía no pueden destetarse del Comando Sur”, remarcó. Aunque anticipó que “esta clase de golpes duraran poco, porque hay un gran sentimiento de liberación no solamente en la lucha por la segunda independencia, sino hay un sentimiento de cómo respetar los derechos democráticos, de los pueblos, de los sectores más excluidos durante la colonia o durante las repúblicas en Latinoamérica”.